Fiestas mayas: la escuela salió a la calle para celebrar el 25

Este 1ro de junio se realizó la celebración de las Fiestas Mayas en la Escuela 5 (aquellas que, desde 1811, se hacían en la Plaza Mayor —actual Plaza de Mayo— todos los 25 para conmemorar la revolución de 1810).
A eso de las 10.00 hs, se cortó el tránsito en la calle Páez y empezaron a llegar las familias. El día estaba radiante, prometía una jornada a pleno sol entre el adoquinado y la vereda de la escuela.
Al ratito, empezó a tocar la Banda de la Policía: acompañaron el ingreso de la bandera y las estrofas del Himno, tocaron tres marchas y después el chamamé "Kilómetro 11" (se llegó a ver una pareja de valientes bailarinas moverse al compás) y "Manuelita", de M. E. Walsh. En el interín, el director de la Banda les cedía la batuta y su gorra a los chicos de la escuela, y los dejaba hacer de directores por un ratito.
Después de la banda, empezaron los juegos de destreza que habían organizado las dos maestras de educación física y que fueron coordinados por la seño Vivian (que corrió de acá para allá sin parar). Participaron los chicos, docentes y padres al mismo tiempo en carreras de postas y de embolsados, entre otros juegos que divirtieron a todo el mundo.
Al final del evento, los chicos de primero repitieron el número del acto del 25 de mayo: los negritos y las mulatas volvieron a bailar, pero esta vez con una coreografía nueva hecha por la seño Andrea para la calle.
Durante toda la fiesta, nuestro "DJ estrella", el celador Ezequiel, estuvo musicalizando y logró lindos momentos de la concurrencia, que organizó un largo trencito o salió a mover el esqueleto, o con el consabido baile del caballo, que siempre saca a bailar a chicos y grandes por igual. Y el micrófono estuvo en manos de las seños Susana e Ilda, que oficiaron de conductoras de la ocasión.
La Coope vendió chocolatada con churros y medialunas para quien quisiera colaborar y amenizar el fresquito más bien primaveral.
Por acá y por allá se vieron caras contentas. Junto a las familias y los chicos estuvieron las maestras y la conducción de la escuela. Un evento que salió bárbaro gracias a la buena onda de todos y las ganas de pasarla bien.